El pepino nos ayuda a mantenernos hidratados, reduce el colesterol y elimina las toxinas de nuestro organismo.
El pepino es tan refrescante y ligero que a veces pensamos que aporta agua y poco más.
El pepino tiene un gran poder diurético y depurativo, especialmente hay que destacar su contenido en fitoquímicos antioxidantes que se concentran en la piel.
El pepino proporciona Vitamina C, Vitamina B5, Ácido Fólico, Potasio y Magnesio además de oligoelementos como sicilio, cobre, molibdeno y manganeso.
Nuestra piel también se beneficia del consumo de pepino y no solo por el efecto depurativo. La vitamina C no sólo estimula las defensas y protege las células del daño de los radicales libres.
En la piel del pepino se concentra la mayor parte de los nutrientes y sustancias beneficiosas, por lo que conviene consumirlo sin pelar.
Hay que consumirlo ecológico porque en la piel se concentran todos los plaguicidas que se usan en el cultivo convencional. Además el pepino ecológico es más rico en antioxidantes, vitamina Cy minerales como calcio, magnesio y potasio